Proyectos de responsabilidad social en el voleibol
El voleibol es un deporte que no para de crecer a nivel mundial. La existencia de proyectos de responsabilidad social, las inversiones a nivel internacional, el aumento de awareness (visibilidad) de sus campeonatos y el éxito en ventas de los eventos olímpicos son testigos de este crecimiento. Sin embargo, el rol social que puede jugar este deporte es una faceta poco conocida. Lets Keep the Ball Flying (LKBTF) es una organización no gubernamental de origen neerlandés que tiene como objetivo hacer el voleibol accesible para todos. En 2024 inició en Colombia su proyecto piloto para América Latina donde han tenido eventos en el Urabá antioqueño, Barranquilla y Cali.
LKBTF se une a iniciativas locales
LKBTF trabaja con iniciativas en Asia, Europa y África y se enfoca en canalizar recursos, equipos y conocimientos a estos proyectos difundiendo el voleibol a nivel mundial. La organización actúa en diferentes tipos de proyectos como: donaciones de material, apoyo logístico a proyectos existentes, el 1% movement (donación de 1% del salario de jugadores profesionales al proyecto) y difusión de los programas en redes sociales propios y de la Federación Internacional de Voleibol (FIVB).
En Colombia, LKTBF se alió a iniciativas locales como la VoleiPaz y el Volleytips. La unión de estas busca combinar la experiencia y experticia de una organización no-gubernamental internacional con el conocimiento del territorio y de las dinámicas específicas de los actores locales.
Voleipaz
Voleipaz busca convertir al voleibol en un herramienta para promover la paz y el bienestar. Voleipaz ha trabajado de la mano de líderes comunitarios del barrio Poblado Dos de Cali y de la institución educativa Nuevo Latir para desarrollar actividades junto a LKTBF en la zona. La iniciativa busca resaltar los atributos de comunicación y trabajo en equipo del voleibol como motores de paz y resolución de conflictos en territorios vulnerables. Conoce más sobre el proyecto de Voleipaz aquí.
Volleytip
Andrés Piza, jugador de la selección nacional colombiana, capitanea un piloto en el Urabá Antioqueño (Apartadó, Carepa, Turbo y Necoclí) que busca llevar el voleibol de alto nivel a comunidades apartadas de Colombia. Por medio de demostraciones y la creación de torneos regionales Piza le da acceso a un público nuevo alejado de las ciudades capitales al voleibol. Con este propósito le gustaría tener el apoyo de entidades públicas y privadas para hacer este modelo replicable a nivel nacional y usar al voleibol como un restaurador del tejido social. Conoce más sobre el Volleytip y sus ambiciones aquí.
Oportunidad para la empresas
Estos proyectos piloto llegan para complementar el crecimiento del ecosistema de este deporte en zonas apartadas de Colombia. Las perspectivas de crecimiento del voleibol en el país son muy prometedoras tanto en la alta competencia, en la práctica amateur y en el establecimiento de una nueva opción de entretenimiento deportivo. La atención y el consumo de este deporte han crecido gracias a una fuerte inversión por parte de la FIVB en el desarrollo del deporte a nivel mundial. La creación de Volleyballworld y el acuerdo de derechos de sus torneos internacionales con ESPN son claras muestras de ello.
Estas iniciativas de promoción del deporte e impacto social son oportunidades para que las empresas conecten con las comunidades de sus zonas de influencia. Articular acciones de responsabilidad social, acciones de mercadeo y relaciones públicas pueden ayudar a posicionar su empresa y vincularla a los valores positivos del deporte y tener un impacto social.
Colombia se perfila como un futuro referente del voleibol mundial gracias al inmenso potencial y al trabajo que los actores del deporte realizan día a día.
Lap Deportes mantiene su compromiso con el voleibol y apoya a estas organizaciones con el objetivo de expandir la práctica y la visibilidad del voleibol y su impacto social en Colombia.
Redacción LAP Deportes